"Masculinidades contra el machismo: jóvenes cubanos se oponen a la violencia de género"

Cartel de Ramiro Expósito Gaspe con el diseño de la camiseta seleccionada como una de las cinco propuestas de la campaña mundial Únete, convocada por las Naciones Unidas (ONU.







Por Dayron Oliva Hernández. Red Iberoamericana de Masculinidades

La Habana. Revertir la violencia de género es vital, más aún, si de lo que se trata es cuestionar el machismo que tradicionalmente caracteriza la masculinidad de muchos hombres, sobre todo desde aquellos ámbitos que gozan de la masiva atención de la sociedad en su conjunto, como la música, el audiovisual y, porqué no, el diseño gráfico. Apostar por la toma de conciencia en los hombres del rechazo a toda expresión de desigualdad y de discriminación en relación con las mujeres, es un esfuerzo que puede resultar en una nueva forma de pensar y actuar para las masculinidades.

Con tales motivos, y como parte de las acciones de la campaña Atrévete a ser hombre: el machismo mata de la Red Iberoamericana de Masculinidades (RIM) e impulsada por su coordinador general, el Dr. Julio César González Pagés, la Casa del Alba Cultural, el pasado día 10 de noviembre, acogió la exposición colectiva de once carteles realizados por jóvenes estudiantes del Instituto Superior de Diseño (ISDI), y que proponían la reflexión acerca de la violencia de género, en especial, de la ejercida por los hombres contra las mujeres.

A tono con la Jornada Internacional en contra de la violencia hacia las mujeres que se efectúa en el mes de noviembre desde hace varios años, la exposición de carteles coincidió, no por casualidad, con el espacio musical que cada mes nos regala la cantante Rochy Ameneiro, quien además tiene a su cargo el proyecto Todas Contracorriente, el cual se enfoca en las mujeres y promueve la igualdad entre mujeres y hombres a través de la música.

Al respecto, Julio César González Pagés refirió, al numeroso público asistente, de que era una necesidad hecha realidad, la de involucrar a hombres y jóvenes diseñadores, en su mayoría con edades de 22 años, en el lenguaje de la ideología de género, con el fin loable de sensibilizar sobre la equidad de género y la cultura de paz, a partir del diseño gráfico, en unión con la música y el audiovisual.

Basados fundamentalmente en la violencia física y psicológica que sufren las mujeres a manos de los hombres, en parte por cómo han operado las relaciones de género, los carteles abordan la problemática desde diversas temáticas como la historia, la moda, el cosmético, la religión, el ajedrez, los roles, entre otras.

"El significado de estos carteles es apoyar, desde el diseño gráfico, las importantes acciones que promueven la igualdad entre hombres y mujeres, y que lleva adelante la Red Iberoamericana de Masculinidades y su coordinador general, Julio César González Pagés", expresó Ramiro Expósito Gaspe, estudiante de 3er año de la carrera Diseño Industrial, el cual interviene con dos carteles, y quien además fue uno de los cinco jóvenes seleccionados por una de sus propuestas de diseño para la campaña mundial Únete, convocada por las Naciones Unidas (ONU) y que tiene como centro favorecer la no violencia contra la mujer.

Convencido de la acertada disposición del empleo del cartel y el hecho de que la exposición haya sido en el enrejado de la Casa del Alba Cultural, José Pedro Camejo Domínguez, estudiante de 4to año de la carrera de Diseño de Comunicación Visual, presentó dos carteles. Uno, alegórico a un fragmento de la Biblia, que toca el debate de cómo el sistema religioso ideado por hombres para estructurar la sociedad, permitió el dominio sobre las mujeres. Mientras el otro, revela ese mundo que estereotipa a las mujeres, como el de la cosmética y el maquillaje, los que, debido a los daños físico-psicológicos, no pueden disimular las huellas dejadas por la violencia. “Si bien todos los hombres no somos iguales, es común la violencia contra las mujeres. El diseño puede ser una herramienta para ver el asunto de manera diferente. Es por ello que el cartel, como elemento del diseño, en su función directa con la calle, permite llegar a las personas y al espacio público”, aseveró.

Por su parte, Gerardo Lebredo Sánchez, estudiante de 4to año de la carrera de Diseño de Comunicación Visual, orientó sus dos carteles, desde los símbolos de un ave y una rosa al revés, a tratar la violencia psicológica que sufren las mujeres, algo que según su opinión es menos invisible, y que ha sido producto de la reclusión que ellas han vivido, a raíz de la imposición de los roles domésticos y maritales. “Hacer algo como joven, a partir de la oportunidad que ofrece el cartel, pretende comunicar y establecer un diálogo con la sociedad”, concluyó.

Para Jorge Enríquez González, estudiante de 4to año de la carrera de Diseño de Comunicación Visual, aprovechar las características del cartel combina la participación de jóvenes con el intento de trasmitir un mensaje creativo, que trascienda a la conciencia de las personas comunes, así como de incitar el pensamiento y poner a pensar. “Con el cartel lo que sugiero es un contexto paralelo, un símil, entre el ajedrez y la violencia de género. La apropiación de dos piezas fundamentales de este deporte, como el Rey y la Dama que está caída, es una provocación a preguntarnos el porqué”, señaló.

Tomar una postura mediante el cartel para frenar esos problemas que se derivan de la desigualdad de género, constituyó una motivación para Patricio Herrera Vega, estudiante también de 4to año de la carrera de Diseño de Comunicación Visual. “Tratar un concepto enmascarado para que el espectador decodifique, es uno de los objetivos de mi propuesta; que además, mediante una imagen desenfocada, convida a ver, a ponernos en la situación, desde los ojos de una mujer que ha sido víctima de la violencia física por parte de un hombre”, indicó.

Dentro del conjunto expositivo también encontramos las obras de Fernando Pupo, estudiante de 4to año de la carrera de Diseño de Comunicación Visual, que se vincula con la moda, y de Gabriel Lara, recién graduado en la misma especialidad, y que ilustra a través de una especie de almanaque las estadísticas que dan cuenta de las consecuencias que sufren las mujeres por la violencia.

Desde su fundación en el año 2007 hasta la fecha, la Red Iberoamericana de Masculinidades (http://www.redmasculinidades.com), bajo la oportuna coordinación general de Julio César González Pagés, ha vinculado el quehacer académico con el activismo social, en 28 países que conforman el área geográfica, y se ha propuesto, desde los estudios de género y de masculinidades, cambiar el patriarcado y la ideología machista, culpables de las inequidades y la violencia entre hombres y mujeres. De ahí que una de las experiencias más importantes ha sido la inclusión de estudiantes universitarios en estas acciones, lo que ha dado como resultado, la realización de más de 70 audiovisuales de bien público, que fomentan nuevas formas de masculinidades basadas en la cultura de paz.