Masculinidades a debate en Barcelona en búsqueda de la equidad

En la foto Raewyn Connell, precursora de los estudios de masculinidades con Julio César González Pagés coordinador géneral de la Red Iberoamericana de Masculinidades en el Congreso Iberoamericano de Masculinidades y Equidad CIME 2011




Homes Igualitaris celebra el 7 y 8 de octubre el Congreso Iberoamericano de Masculinidades y Equidad CIME 2011


Por Alejandro Martínez González

Profesor Titular del Centro
Universitario La Salle-UAM
Red Iberoamericana de Masculinidades


La Asociación catalana Homes Igualitaris, federada con Hombres por la Igualdad de Género AHIGE, ha organizado los días 7 y 8 de octubre el Congreso Iberoamericano de Masculinidades y Equidad CIME 2011, con la intención de impulsar tanto la investigación en temas de masculinidad, como el movimiento de hombres por la igualdad, así como la promoción de la intervención y de las políticas dirigidas a los hombres que fomenten la equidad.

El encuentro, cuya conferencia inaugural estuvo a cargo de una de las pioneras en los estudios sobre masculinidad, Raewyn Connell, se organizó en torno a seis paneles en los que se agruparon un total de 78 comunicaciones, a las que se sumaron nueve talleres, dos sesiones de Teatro-Forum, dos convocatorias de reuniones y dos foros de discusión. Su ambiciosa estructura y su pretendido carácter interdisciplinar procuró abarcar temáticas relacionadas con las masculinidades tan diversas como la vida laboral y personal, la violencia, el antimilitarismo, el movimiento de hombres por la equidad, la coeducación, la salud, la sexualidad o la diversidad.

A la exposición de las numerosas comunicaciones, siempre algo ajustadas de tiempo, le sucedieron interesantes turnos de palabra en los que se pudieron escuchar frases que bien pueden sintetizar las ideas y los planteamientos compartidos en el encuentro, entre las que sirven como ejemplo las siguientes:
“Grandes esperanzas de cambio; La política de género cuestiona el sistema, el capitalismo, las relaciones de poder; Ser chico es un factor de riesgo para el fracaso escolar; El lenguaje entraña un riesgo hegemónico; ¿Estamos realmente promoviendo el cambio?; Igualar género y rol es un reduccionismo; Del feminismo teníamos que haber aprendido su capacidad para globalizar la demanda; Los estudios de campo en masculinidades son minúsculos; Crear redes e intercambiar ideas es fundamental; Todavía no llegamos a la ciudadanía, no llegamos a la calle; Yo no quiero ayudar en la igualdad, quiero corresponsabilidad; Los hombres tenemos una problemática silenciada; Los chicos trans corren el riesgo de acabar reproduciendo la masculinidad hegemónica; ¿Pensamos en las contradicciones propias o sólo nos encargamos de identificar las ajenas?

Para la clausura, a la decepción que supuso la supresión de la video conferencia con Michael Kimmel, le sucedió la conferencia de Stefano Ciccone sobre Los hombres frente al cambio, el poder y la libertad, que la falta de traducción simultánea del italiano dejó algo deslucida, y la lectura del manifiesto por una sociedad más igualitaria en lo que se refiere a la superación de la masculinidad hegemónica, fruto del trabajo desarrollado por los participantes en el Foro sobre Políticas de Género.

En el debe del encuentro queda el escaso esfuerzo por construir redes reales de colaboración y cooperación iberoamericanas; un mayor tiempo para compartir experiencias, reflexiones y debates; y quizá una todavía necesaria contextualización y revisión de los estudios sobre masculinidades desde su origen hasta el momento actual, que hubiera incorporado la referencia a sus principales figuras en España y Latinoamérica y que hubiera hecho más justica al título del Congreso. En el haber sin duda el mero hecho de la convocatoria; el esfuerzo organizativo; la amplia y rica participación de activistas, colectivos, asociaciones y universidades; y el ánimo por impulsar el movimiento de hombres por la igualdad.