Red Iberoamericana y Africana de Masculinidades RIAM

Noticias relacionadas con las actividades de la Red Iberoamericana y Africana de Masculinidades RIAM

Tuesday, October 27, 2009

Mercado de Trabajo

Por Susel Ma. Aja Pajón

Universidad de la Habana.

Desde hace algunos años en el Mercado de Trabajo de los países que integran el Orbe se constata la presencia, en aumento, de un sector perteneciente al género femenino que ha logrado expandir su actividad laboral mas allá de los limites del trabajo Doméstico-Familiar, entendiendo por este la preocupación por el mantenimiento de la infraestructura del hogar y el cuidado de los distintos miembros que integran el núcleo familiar.

La mujer ha ocupado disímiles puestos de trabajo que le han permitido demostrar su igualdad de condiciones físicas y mentales con los hombres, poniendo en cuestión toda desigualdad de género basada en un fundamento biológico. Sin embargo la transformación que pudo significar y de hecho significó la salida de la mujer del marco del hogar con su inserción en el Mercado Laboral, no produjo una total ruptura con las inequidades de género que se desarrollan alrededor y dentro de la estructura de dicho mercado (desigualdades tradicionales y otras nuevas) que afectan en diferentes medidas y aristas a ambos sexos.

Veamos el asunto desde las dos perspectivas: FEMENINA Y MASCULINA. La incorporación de las féminas al trabajo ya sea formal o informal pudo haber traído aparejada una sustancial transformación de las relaciones sociales establecidas tradicionalmente entre géneros a nivel familiar, pero el proceso no se produjo de esa manera, la inserción al mercado de trabajo de la mujer no significó para ella una redistribución mas equitativa de las tareas del hogar, en otras palabras no se produjo una disminución de las obligaciones hogareñas.
En mi opinión las mujeres han asumido lo que nosotros llamaríamos una doble jornada laboral manteniéndose de esta forma los roles tradicionales de el hombre como proveedor, como el que otorga a la familia el sustento económico y el de la mujer como la figura que ha de encargarse de cuidar y mantener el hogar; sustentándose y trasmitiéndose de generación en generación.

Actualmente el mundo que conocemos se ha visto convulsionado por una debacle financiera que ha producido una crisis a nivel internacional que ha profundizado la precarización laboral en un sin números de sectores y a dejando sin empleo a millares de personas sin distinción de ser pertenecientes a países desarrollados o no.

Los porcentajes apuntan hacia un mayor despido femenino, lo cual tiene su explicación en dos razones, que si bien no constituyen los únicos factores, si pueden ser considerados como fundamentales a la hora de realizar un análisis mas exhaustivo, en primer lugar producto de la crisis los sectores mas dañados son aquellos pertenecientes a las llamadas industrias feminizadas, es decir aquellos sectores de la producción que cuentan con una mayor presencia femenina como es el caso de los servicios, el comercio y el ejemplo especifico de la industria textil en América Latina y en segundo lugar se produce un mayor despido de mujeres porque su trabajo es considerado menos rentable por cuestiones tales como el embarazo. No podemos dejar de mencionar además la persistencia y la permanencia de la idea de la existencia, en mayoría, del modelo de familia tradicional, modelo que sustenta que las mujeres tienen siempre quien las mantenga.

Dicho planteamiento sobre el modelo tradicional de la familia, aunque no se ajusta con la realidad, nos da el punto de partida para analizar los efectos que tiene sobre las masculinidades la nueva crisis mundial y el fenómeno del desempleo.

Aunque en valores numéricos las mujeres parecen ser las mas afectadas por le problema del desempleo muchos especialistas han planteado que es a los hombres a los que mas trabajo les ha costado enfrentar la situación puesto que al verse imposibilitados de realizar con éxito su rol de proveedor, ha sido afectada su identidad masculina sustentada precisamente en el hecho de ser el protector de la familia y en ser valorados por el éxito que pueda alcanzar en dicha labor. Se habla de que muchos sufren de una crisis emocional que varía su intensidad y manifestaciones según el tipo de masculinidad (hegemónica o flexible) que asuma el varón en cuestión. Lo cierto es que la problemática económica ha provocado un mayor resquebrajamiento de las tradicionales configuraciones de género, dando paso a nuevas configuraciones de las relaciones sociales, que no dejan de estar inmersas en una profunda crisis y de presentar un panorama confuso tanto para mujeres como para hombres.

Se hace cada día más evidente la necesidad de encontrar caminos que conduzcan a la equidad entre los géneros en pro de que se produzca en el mundo un desarrollo constante y estable de todas las esferas desde una perspectiva mas justa y saludable para todos.

Labels: , , , , ,

0 Comments:

Post a Comment

Subscribe to Post Comments [Atom]

<< Home