Sin contraseña y Macho varón masculino: puentes entre hombres y mujeres

En la foto Julio César González Pagés, Isabel Moya y Cristina Fraga, de AMECO, en la presentación de libros en el marco de la XX Feria Internacional del Libro

Por: Susana Méndez y Amaya Alayo.


Los títulos Sin contraseña, de la periodista, investigadora y profesora Isabel Moya Richard y Macho varón masculino, del Doctor en Ciencias Históricas Julio César González Pagés, fueron presentados el pasado sábado 12 de febrero en el Pabellón Cuba, como parte del programa de la XX Feria Internacional del Libro de La Habana y de las actividades del postgrado de Género y Comunicación.

Gran interés ha despertado en los lectores ambas ofertas literarias, lo cual se pudo constatar por la amplia presencia de un público mayoritariamente joven.
No es la primera vez que los autores coinciden en eventos de esta naturaleza, ya que trabajan temas afines y convergentes y quisimos conocer en esta ocasión las valoraciones que ambos tienen sobre sus recientes títulos.

Julio César González Pagés

El libro de Isabel Moya Sin contraseña. Discurso mediático y trasgresión, trasciende las fronteras de Cuba sobre todo porque da herramientas que en cualquier lugar del mundo pueden ser utilizadas para luchar por una equidad de géneros, pero esto pudiera ser abstracto si no conociéramos la dimensión humana de su autora, que ha estado involucrada en trabajos no solo sobre los medios de comunicación si no sobre todos los factores de cambio en Cuba y en América Latina.

Isabel ha liderado un diplomado que hoy es ejemplo de buenas prácticas al nivel de todo el continente y creo que sería muy importante para los lectores acceder a su libro, divulgarlo, tenerlo como un instrumento de trabajo que no es válido solo para los medios de comunicación, sino también para todas las personas que comunicamos, que somos profesores, dirigentes, que tenemos que lidiar hasta con nuestras propias familias; yo creo que el aprender a comunicarnos nos hace personas más dialogantes y más capaces de luchar por esa utopía de un mundo mejor.
El libro de Isabel nos da esa inmensa posibilidad de que todas y todos podamos tener una metodología y un trabajo que tiene la actualidad de hoy mismo.

¿Qué eje temático une a ambos textos?

Los une la ideología de género, no lo que algunos han llamado perspectiva, si no una forma de pensar y de actuar y sobre todo de establecer los puentes entre hombres y mujeres.

El discurso de Isabel viene desde las mujeres, desde el feminismo, pero nos traza a todos los que trabajamos el tema de masculinidad la posibilidad de un diálogo y yo creo que Isabelita es eso, si me pidieras que la definiera con una palabra, es diálogo, es amistad, es continuidad y el libro de ella se le parece mucho.

Isabel Moya Richard:

Realmente el libro de Julio César González Pagés, Macho varón masculino, que publica el sello de la Editorial de la Mujer es un aporte a los estudios de género en Cuba.
El autor, que ya había rescatado importantes figuras del feminismo cubano de los siglos XIX y XX, mira ahora, con esas herramientas del feminismo, la manera en que se ha construido en Cuba la masculinidad, desde temas tan variados como pueden ser el deporte, la música, la homofobia, etc.

En mi opinión el libro además es el resultado de una investigación rigurosa en la que el autor devela todos los encuentros, talleres y otras acciones que ha impartido en prisiones para hombres, en comunidades, en la propia Universidad de La Habana.
Creo que es un libro no solo para expertos, aunque para ellos es imprescindible, sino que es un libro que está escrito de manera que el lector o la lectora puedan identificarse porque hay muchas vivencias, anécdotas y experiencias que pueden problematizar la manera en que hasta ahora hemos concebido al “macho varón masculino”.

¿Qué une a Isabel Moya y a Julio César González Pagés?


Yo siempre digo que nos une, como la canción de Joan Manuel Serrat “un amor de antes de la guerra”; nos une el respeto y la admiración mutuos. Hemos tenido la posibilidad de compartir espacios de capacitación, hemos estado en algunas prisiones en la tarea de capacitar a reclusos y reclusas y en muchísimos otros lugares del país.

Creo que sobre todo nos une esa vocación de que creemos en un mundo mejor y que además trabajamos para ello, que formamos estudiantes, que creemos mucho en el trabajo colectivo, en la fraternidad y en lo personal admiro sobre todo su generosidad y esa lealtad sin límites a sus amigos y amigas, pero también a los postulados, no es un teórico que escribe que hay que ser mejor y después en la práctica es una persona distinta, no, todo lo contrario, como decía una de las presentadoras es una persona leal , amigo y además un profesor y un investigador de los más altos quilates.